Latigazo Cervical
El cuerpo del ser humano no fue diseñado para absorber ciertos tipos de impactos, en particular los causados por accidentes automovilísticos. La razón de esto es fisiológica, ya que la cabeza humana pesa en promedio entre 10 y 15 libras. Está colocada sobre la parte más flexible de la espina dorsal: el cuello. El cuello está formado por 32 articulaciones, además de músculos y ligamentos, que pueden lastimarse fácilmente. Cuando las articulaciones del cuello se tensan más allá de sus límites naturales, pueden perder la capacidad de regresar a su longitud original, como un par de calcetines viejos que son estirados hasta que ya no pueden regresar a su estado original.
Por otro lado, los automóviles son objetos sólidos que pesan aproximadamente 2 toneladas. Están diseñados para absorber los impactos y minimizar la transferencia de energía, sin embargo la fuerza con la que un coche es chocado por otro equivale a mil libras. La mayor parte de esta enorme fuerza impacta el cuello y la espina dorsal de los pasajeros del vehículo. Bajo estas circunstancias, el cuello no puede sostener la cabeza adecuadamente y esta es sacudida.
El movimiento repentino de la cabeza hacia delante, atrás o hacia los lados, se conoce como latigazo. Aunque el nombre correcto es Síndrome o Trauma de Aceleración Cervical, lo cual describe movimientos rápidos que pueden lastimar las vértebras del cuello, así como los músculos y ligamentos que lo sostienen. Ya que los músculos y otros tejidos del cuello se estiran más allá de sus límites físicos, se genera una tensión extrema y hacen un movimiento brusco similar al de un látigo.
Además los discos de la espina dorsal pueden romperse o estirarse demasiado y las vértebras pueden salir de su posición normal, reduciéndose así su rango de movimiento. La espina dorsal y los nervios del cuello pueden también estirarse demasiado e irritarse. El resultado son lesiones en los músculos, los ligamentos, los nervios y las articulaciones del cuello. Esto por lo regular causa dolores de cabeza, mareos, dolor en los hombros, los brazos y las manos, además una habilidad disminuida para moverse.
Ya que a veces hay contusiones cerebrales, muchas veces las víctimas pueden experimentar también visión borrosa, zumbido en los oídos, náuseas y mareos.
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En todos los asuntos relacionados con lesiones personales es esencial que se tomen todas las medidas necesarias para conservar la evidencia de la mejor manera posible, también es necesario investigar el accidente en cuestión y hacer una demanda antes de la fecha límite impuesta por el Estatuto de Limitaciones.
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Lo anterior no es considerado como asesoría legal. Eso solo puede provenir de un abogado capacitado que esté familiarizado con todos los hechos y circunstancias de un caso particular y específico. Vea los Términos de Uso.